La 89 edición de las 24 Horas de Le Mans, prevista originalmente para arrancar el 12 de junio, será aplazada hasta el 21 de agosto. El Automobile Club de l’Ouest, encargado de la organización del evento, ha decidido el aplazamiento de la carrera en previsión de que en esas fechas pueda haber espectadores de nuevo en las carreras, siempre bajo el estricto cumplimiento de las medidas de salud y seguridad que sean de aplicación.
La decisión, consensuada con el Campeonato Mundial de Resistencia (FIA WEC) y con la Federación Internacional del Automóvil (FIA), se ha tomado con tanta antelación para permitir una mejor gestión de este cambio. Los organizadores han anunciado que están trabajando en estrecha colaboración con otros eventos que podrían verse afectados por estos cambios y ha confirmado que el resto de fechas de los eventos en el trazado de Le Mans permanecerán sin cambios.
La carrera de esta temporada será la primera en la que estarán en pista los nuevos Hypercars por eso la organización se muestra especialmente interesada en que los aficionados puedan estar en pista para disfrutar de un evento tan importante. Habrá que esperar hasta finales de abril para conocer los detalles sobre el formato de carrera y las entradas.
«Aunque fue una decisión difícil de tomar, es la correcta», dijo Pierre Fillon, presidente del Automobile Club de l’Ouest. «Sería impensable celebrar las 24 Horas de Le Mans a puerta cerrada por segundo año consecutivo».
«Estamos haciendo todo lo posible para evitar que eso suceda y para que los competidores tengan una visión clara de toda la temporada. Estamos trabajando para organizar un evento seguro, con todas las garantías de salud necesarias. La carrera de este año promete tener toda la emoción cuando la nueva categoría Hypercar haga su debut», añadió Fillon.