El presidente de Ferrari, Luca di Montezemolo, se mostró amargamente decepcionado el sábado tras el mal resultado de su equipo en clasificación, pero eligió un mal momento para regresar a Italia, el italiano no se quedó para presenciar la magistral victoria de Alonso en el trazado urbano de Valencia.
Montezemolo, en una visita fugaz al paddock para tratar el asunto de reducción de costes, se mostró muy molesto con el undécimo puesto de Alonso en parrilla y señaló con el dedo acusador a Pirelli como causa del mal resultado.
Pero 24 horas más tarde, el piloto español hizo las delicias de su equipo y de los aficionados más entusiastas que se dieron cita en la ciudad del Turia para presenciar como se subía a los más alto del podio y se situaba líder del mundial con una ventaja de 20 puntos sobre Mark Webber.
Junto al piloto asturiano se subieron al podio otros dos campeones de F1: el piloto de Lotus Kimi Raikkonen y el heptacampeón Michael Schumacher, que disfruta de su primer podio desde 2006, el primero con Mercedes.
En el emocionante Gran Premio de Europa, los principales contendientes al titulo, Sebastian Vettel y Lewis Hamilton no pudieron sumar ni un solo punto, el RB8 sucumbió a un fallo mecánico, mientras que el MP4-27 terminó contra las barreras tras un toque con Maldonado.
El francés Romain Grosjean fue otro de los perjudicados en este Gran Premio, su Lotus E20 se quedó parado en pista cuando trataba de alcanzar al F2012 de Alonso.
Un inusualmente emocionado Alonso recogió una bandera española en a primera vuelta tras cruzar la bandera a cuadros para pasear la por el trazado, el coche se quedó parado frente a las tribunas y el piloto, mientras esperaba que un coche le recogiese, disfrutó junto a los fans que estaban encantados con su triunfo.
«Las gradas estaban llenas de color y banderas españolas y, después de que los jugadores ganas en la Eurocopa, me siento muy orgulloso de ser español en este momento», dijo el piloto de Ferrari. «En realidad nada se puede comparar con esto».