La tensión era evidente en el trazado italiano de Mugello cuando le preguntaron al director de competición de Pirelli, Paul Hembery, por las críticas de Michael Schumacher hacia la forma en que se degradan los neumáticos esta temporada, lo que el heptacampeón comparó con pilotar un monoplaza de F1 tan lento como un safety car.
«No hemos hablado», dijo Hembery a la revista alemana Auto Motor und Sport. «Acabo de leer algo en la red sobre los neumáticos de su compañero de equipo Nico Rosberg, pero es algo muy diferente».
Al responsable de los neumáticos Pirelli en la F1 le preguntaron si las críticas de alguien como Schumacher, siete veces campeón del mundo, eran irritantes, el británico respondió: «Nosotros fabricamos los neumáticos del modo en que se nos pidió».
«La FIA, Bernie Ecclestone, incluso los equipos, querían que fuese de esta manera. El portavoz de los equipos, Ross Brawn, es al mismo tiempo el jefe de Schumacher».
«Hubo cuatro ganadores diferentes en las cuatro carreras disputadas hasta la fecha, esa es la muestra de que algo hemos hecho bien», insistió Hembery. «Como aficionado me habría emocionado».
Cuando le preguntaron si, al menos, puede entender al frustración de Schumacher, añadió: «Los cuatro ganadores de este año no lo han sido por casualidad. Eran, por mucho, los mejores pilotos en cada carrera y todos ellos fueron más rápidos que sus compañeros de equipo».
«Puedo entender que Michael estuviese frustrado en la última carrera. Entre los cuatro ganadores hasta ahora hay dos alemanes, y además tienes a Kimi (Raikkonen) en el podio en su cuarta carrera tras el regreso. Los pilotos son ganadores, no son felices a menos que ganen», añadió el británico.
Hembery también negó que los neumáticos se hayan vuelto esta temporada más importantes que los propios monoplazas o que los pilotos: «Eso es un error. El piloto tiene un gran impacto».
«De todas formas estoy convencido de que en Silverstone, a más tardar, los equipos deberían tener el problema bajo control. Así ocurrió la temporada pasada»
«De todas formas estoy convencido de que en Silverstone, a más tardar, los equipos deberán tener el problema bajo control. Así como lo hicieron el año pasado».
También añadió que Pirelli no va a hacer caso de reacciones instintivas: «Si hay 23 pilotos satisfechos y sólo uno insatisfecho, entonces no creo que tengamos que cambiar nada», dijo al diario Bild.