Crece la expectación ante la cercanía del inicio del Campeonato del Mundo 2013 y crecen a su vez las expectativas sobre la competitividad de la Scuderia Ferrari.
Es algo natural, después un mes de pruebas alentadoras y con la serenidad demostrada por nuestros dos grandes protagonistas, Fernando Alonso y Felipe Massa, que en poco más de una semana volverán a la pista a bordo del F138 en el circuito Albert Park de Melbourne.
Tendremos que esperar hasta el 16 de marzo, día de la clasificación, para poder realizar las primeras valoraciones reales de las prestaciones de cada uno de los coches. Nunca antes como en este año, con la estabilidad que el reglamento técnico ofrece, todo pronóstico no sea probablemente más que un ejercicio inútil y casual.
Pero tratando de aplicar una cierta lógica y coherencia, que va más allá del entusiasmo y de la esperanza que el inicio de cada temporada pueda generar, no se puede imaginar que los equipos que eran competitivos la pasada temporada, no vayan a serlo este año.
Stefano Domenicali, Director de la Scuderia Ferrari, declaró al ser requerida su opinión sobre el inicio de la temporada: «Pensar en sacar conclusiones tras la primera clasificación en Australia sería prematuro, puesto que representa sólo el inicio de un largo camino que finalizará en noviembre. Sin embargo, puede ser considerada por muchos motivos como un banco de pruebas importante para determinar el orden de jerarquía. Creo que los equipos que en San Paulo finalizaron en las primeras posiciones, repetirán éxito también en Melbourne, probablemente con márgenes más reducidos, que es lo que todos nosotros esperamos».
«¿Que por qué estoy convencido de que Ferrari ha dado un paso adelante? La nueva estructura empresarial, los métodos de trabajo, la modificación de los instrumentos que hemos utilizado para realizar el trabajo en este monoplaza, la consistencia de los resultados con respecto a nuestros objetivos y aquello que hemos visto en los entrenamientos que acaban de terminar… Todo esto parece indicar que finalmente estamos en el camino correcto, al menos en comparación con el pasado. Haciendo, por tanto, un análisis centrado sólo en nosotros mismos, a menos que alguien haya hecho un trabajo extraordinario, estoy convencido de que Ferrari será capaz de estar en la batalla hasta el final. Un podio en Australia sería una buena base sobre la que construir los éxitos que necesitamos. Además, aparte del rendimiento actual del coche, nuestro trabajo en el túnel del viento nos da motivos para creer en la parcela de la aerodinámica, de donde viene un 90% del rendimiento, con lo que podemos trabajar con cierta calma. La estabilidad de las normas es otra garantía de que no habrá sorpresas con alguna solución creativa excepcional que marque la diferencia, y tengo mucha confianza dados los cambios que hicimos el año pasado».
En cuanto a la competencia durante el año, Domenicali añadió: «Estoy seguro de que en el transcurso de la temporada la competencia se irá reduciendo, puesto que no debe subestimarse el esfuerzo requerido por parte de todos los equipos de cara al proyecto de 2014. Estamos hablando de un coche completamente distinto y se corre el riesgo de no llegar preparado. Cuanto más pequeña sea la organización, antes se tendrán que poner con ello y más grandes serán los recursos que deban emplear en el nuevo proyecto. Mientras que, para los equipos grandes, el ejercicio será el de equilibrar los recursos necesarios para mantener el desarrollo para ser competitivos hasta el final, sin dejar de lado todas las atenciones que se deberán dedicar a 2014 para tratar de evitar el riesgo de quedares atrás».