Bernie Ecclestone insiste en que está dispuesto a limpiar el nombre de Gran Bretaña del calendario de 2010, en el caso de que Silverstone no quiere pagar la tarifa por organizar el Gran Premio de Gran Bretaña 2010.
Con posibilidades de que finalmente sea Donington quien organice la carrera casi agotadas, parecía que el jefe ejecutivo de F1 podría trasladar la carrera para el año que viene a su sede tradicional llegando a un acuerdo alternativo para salvaguardar el Gran Premio de Inglaterra.
Pero un portavoz del circuito de Silverstone dijo que la actual oferta de Ecclestone no es «comercialmente viable», a lo que el multimillonario británico respondió sin despeinarse: «Nadie está obligando a aceptar. Esto es un negocio. Les hemos ofrecido un acuerdo», dijo al diario Daily Express. «¿Es necesario un Gran Premio de Inglaterra? No», así de rotundo se mostraba con este tema.
La controversia entre Silverstone y Ecclestone radica en considerar tradicional o no el trazado que albergó la primera carrera de F1 en el campeonato mundial en 1950. Silverstone busca gozar de una situación protegida por ser uno de los tradicionales circuitos en los que se disputa una carrera de Fórmula 1.
«Italia es una carrera tradicional, porque siempre han corrido en Monza», argumentó Bernie. «Mónaco es tradicional que siempre han tenido la misma pista».
«Gran Bretaña y Francia han corrido en tres circuitos diferentes. Ellos quieren un acuerdo de reducción de precios porque es un trazado mítico. Eso no es tradicional para mí. Gran Bretaña no está protegida», dijo Ecclestone.
«Me gustaría comprarme un nuevo avión, he tenido uno durante 40 años, eso es tradicional, pero nadie me está ofreciendo un acuerdo barato. No es así como funciona», expresaba indigando el dueño de los derechos comerciales de la F1.
Por otra parte, según informa el diario Times el incumplimiento del contrato por parte de Donington Park puede costarles hasta 15 millones libras esterlinas en gastos de cancelación.
(GMM)