Cualquier aficionado a la Fórmula 1 estará más que contento con las carreras que hemos visto este año, han estado llenas de emoción, sorpresas y grandes duelos en pista. Sobre todo porque nadie esperaba nada semejante. El aplazamiento de normas a la siguiente temporada a causa de la pandemia hacía presagiar un octavo título para Lewis Hamilton con bastante facilidad.
Estamos viendo una batalla por el título entre dos equipos, y eso es algo que no veíamos desde hacía muchos años. Ni siquiera veíamos una lucha entre compañeros de equipo, algo que podría darse con un equipo dominante como Mercedes. Desde que Nico Rosberg le ganó el título a Lewis Hamilton en 2016, el heptacampeón ha dominado la parrilla.
Eso es realmente malo para el espectáculo, para los aficionados que quieren disfrutar de la emoción de las carreras; incluso es malo para los propios pilotos que no ven un aliciente importante en salir a pista sabiendo que ganará el de siempre.
Empezando por la última carrera en Paul Ricard, donde la estrategia de equipo fue clave para que Red Bull venciese a Mercedes, como explica Ross Brawn en su última columna para la web del campeonato: «Cuando alguien aprieta el gatillo de una segunda parada, no puedes entrar a boxes una vuelta más tarde porque sencillamente ya es demasiado tarde».
«No querían que se repitiera lo de Barcelona. Fue un enfoque realmente agresivo de Red Bull y eso creó un gran final», añadió el ex jefe de filas de Mercedes, aunque elogió el trabajo de un gran piloto como Hamilton: «Lo que Lewis demostró fue su capacidad para sacar más provecho de los neumáticos en circunstancias difíciles».
«Mi esposa me preguntó: ¿qué harías si estuvieses de nuevo en el muro de boxes de Mercedes? Y le dije: me alegro de no estar en el muro de boxes. ¡Soy demasiado mayor y no sería bueno para mi tensión arterial!», bromeó Brawn.
«Lo que estamos viendo ahora es una lucha clásica de campeonato y nos hace darnos cuenta de lo que nos hemos estado perdiendo en estos últimos años. Nos encanta una lucha entre equipos por el campeonato, y si no podemos tener eso, queremos que dos compañeros luchen por el título».
Pero 2021 ha traído consigo bastantes cambios en ese aspecto, no sólo en la lucha por el campeonato sino que el resto de posiciones están muy disputadas. En la batalla por la tercera posición se sitúan Ferrari y McLaren sin que ninguno de ellos atisbe un dominio claro, lo que nos regalará duelo para toda la temporada.
Y en la quinta posición podríamos tener batalla a tres bandas: AlphaTauri, Aston Martin y Alpine. Cada uno con sus fortalezas y debilidades. Mientras unas pistas benefician a unos coches perjudican a otros. Con tres equipos que de forma natural podrían tener un coche entre la novena y la decimotercera posición, cada curva cuenta en la batalla.