La F1 ha advertido formalmente a los potenciales accionistas que una de las claves de este deporte se encuentra en su director ejecutivo, especialmente en el estado de salud del millonario británico de 81 años, a través de un folleto de comercialización ante la inminente salida a cotización de la F1 en la bolsa de Singapur.
El documento, al que tuvo acceso el Financial Times, señala que Ecclestone es sospechoso en el escándalo de corrupción relacionado con Gerhard Gribkowsky y en los procedimientos civiles relativos a la venta de este deporte en 2006. También se reconoce que el británico está siendo investigado por las autoridades fiscales de Gran Bretaña.
«Si bien tenemos un plan de sucesión para el señor Ecclestone, y cerrados bajo contrato los ingresos que nos proporcionan estabilidad en el corto plazo, la pérdida del Sr. Ecclestone podría interrumpir nuestras operaciones y tener un efecto adverso en nuestro negocio y en el balance final», dijo la circular.
El documento también recoge la amenaza que supondría una ruptura de los equipos con la F1, junto con la posibilidad de que pueda darse un cambio fundamental en cómo se transmite el deporte.
«Podemos pensar en cambiar el modelo (la televisión) y el modo de explotación (que ahora fluye hacia Internet) de forma independiente en el futuro», añade.
Sin embargo, otro problema potencial es que Mercedes aún no ha firmado el nuevo Acuerdo de la Concordia, a lo que hay que añadir los rumores que insisten en que el fabricante de automóviles valora la posibilidad de abandonar la competición en la máxima categoría.
El jefe del equipo con base en Brackley, Ross Brawn, dijo que la FIA también tiene que subir a bordo: «Creo que veremos en los próximos meses, claramente donde se sitúa la FIA en todo esto».
El presidente de Ferrari, Luca di Montezemolo, dio la bienvenida a la salida a bolsa, en medio de rumores de que podría recibir 25 millones de dólares en acciones de la F1 como miembro de la junta en representación del equipo con más historia en la F1.
«Vamos a tratar todo esto en Monte Carlo», dijo Montezemolo a La Gazzetta dello Sport cuando se le preguntó por la salida a bolsa. «Sería una ventaja para los equipo, más estabilidad y mayor transparencia».