El jefe del equipo Mercedes, Ross Brawn, ha insistido en que su equipo está firmemente comprometido con la casi desmoronada asociación de equipos de F1 (FOTA), que ya no cuenta entre sus filas con cinco de las doce escuderías de 2012 y con continuos rumores sobre la salida de algún otro equipo.
La alianza con base en Ginebra ha perdido el respaldo de dos de los grandes: Red Bull y Ferrari, así como también han lamentado la salida de Sauber y Toro Rosso, que se unía a finales del año pasado a HRT. Y los rumores insisten en que el siguiente en caer podría ser Lotus.
Pero Brawn dijo a los medios que el equipo alemán sigue estando «muy comprometido» con la FOTA, organismo del que el jefe de McLaren Martin Whitmarsh sigue siendo presidente.
«Nosotros creemos que es una lástima que hayamos perdido algunos miembros de la FOTA porque creo que en última instancia podríamos lamentarlo», dijo Brawn a Sky Sports.
Contemplando las razones de la separación de la FOTA, Brawn explicó: «Cuando hay presiones externas se empuja a estar juntos. Ahora no las hay, así que es comprensivo que la rivalidad natural de los equipos los distancie un poco».
«Espero que no lo tengamos que lamentar, porque uno de los objetivos fue encontrar las soluciones correctas para la F1, no sólo para equipos individualmente», añadió Brawn.