La Fórmula 1 corre el riesgo de sufrir la pérdida de otro fabricante de automóviles si no actúa adecuadamente en medio de la congelación de motores, al menos eso es lo que opina el jefe de Red Bull, Christian Horner.
Después de las críticas por la excesiva ventaja de los motores V8 de Mercedes en la temporada pasada, pese a la moratoria de desarrollo, se ejerció presión sobre la FIA para que permitiese a los fabricantes de motores más rezagados se pusiesen al día.
Pero cuando la FIA dijo que sólo permitiría a una de los motores continuar el desarrollo para alcanzar el ritmo en 2010, las escudería no lograron ponerse de acuerdo en cuales deberían ser los límites de es igualdad.
Incluso se cree que el motor de Renault, aunque quizás no sea tan potente como el de Mercedes o Ferrari, esto podría ser una ventaja en 2010 ante la prohibición de repostar porque el motor del fabricante fracés es mucho más eficiente.
«La FIA tiene todos los datos en la mano para decidir un ajuste de los motores», dijo Horner a la publicación alemana Auto Bild Motorsport.
Las normas de la congelación de motores en realidad no estipulan la necesidad de tener una igualdad de rendimiento, pero después de la salida de Honda, BMW y Toyota, ahora hay sólo cuatro fabricantes de motores en la F1, incluiyendo el regreso Cosworth a la parrilla con los nuevos equipos.
«Sería un desastre perder a otro fabricante de motores al final del año porque no pueden competir con los otros», agregó Horner.
«Las reglas para el desarrollo de los chasis son tan estrictas que el motor desempeña un papel cada vez más importante», dijo.
(GMM)