El tiempo ha dado un giro radical, pasando a un frío inusual, incluso llegándose a ver la nieve en Barcelona, al acabar los segundos entrenamientos de pretemporada; pero el calor de la competición es evidente en la Scuderia Ferrari tras los ocho primeros días de entrenamientos en territorio español.
Los primeros pasos del F138 han sido buenos y, aunque evidentemente queda mucho trabajo por hacer para entender bien su comportamiento, ambos pilotos son optimistas tras haberlo probado a lo largo de estas dos semanas.
El monoplaza ha acumulado casi 3000 kilómetros entre Jerez y Barcelona y aún quedan otros cuatro días de entrenamientos en el Circuit de Catalunya antes de partir para Melbourne, donde comenzará el Mundial de 2013 el próximo 17 de marzo. Esas jornadas restantes se utilizarán para completar el análisis del coche y extraer su máximo rendimiento con la configuración actual.
Un buen espíritu de equipo es una parte fundamental de la preparación en las semanas previas al Gran Premio de Australia, con los pilotos y miembros del equipo todos centrados al unísono en lo que está por llegar, sin impotar las condiciones meteorológicas extremas que pueda ofrecer España en los días previos a los últimos entrenamientos.
Durante los cuatro días en Montmeló, Fernando y Felipe completaron un total de 363 vueltas, un poco más que sus rivales directos. Tras hacerse al F138 y completar unas pruebas aerodinámicas en los primeros dos días, el piloto español pudo centrar sus esfuerzos en la puesta a punto y realizar comparativas de neumáticos en su último día al volante.
Finalizó su primera aparición en pista de la temporada con el segundo mejor tiempo de la semana, realizado con el neumático blando. Llovió durante buena parte de la jornada del brasileño al volante, quien completó unas pruebas muy útiles sobre mojado para el equipo, marcando tiempos razonables e informando de que el coche se manejaba muy bien en condiciones frías y sobre un trazado resbaladizo. Sin embargo, los tiempos por vuelta no significan nada todavía y, una vez más esta semana, se hace difícil sacar conclusiones precisas sobre el potencial de cada uno en el pit lane.
Esto se debe a las grandes diferencias entre los programas y la cantidad de combustible de cada uno en un trazado donde cada 10 kilos de combustible te cuesta tres décimas por vuelta. La semana que viene el equipo llevará las primeras piezas de desarrollo planeadas para el F138 en Barcelona y dedicará los últimos días de entrenamiento a realizar distintas simulaciones de carrera. Gracias a esto, puede que se vea una imagen más clara de cuál es el nivel de rendimiento de cada equipo.
Otro factor desconocido al principio de temporada va a ser el comportamiento de los nuevos neumáticos. La gama entera de Pirelli está compuesta por neumáticos más blandos que el año pasado y eso se va a notar, no solo en la clasificación, donde se verán tiempos más rápidos –esto se puede deducir por el hecho de que los tiempos en los entrenamientos de esta semana han sido más rápidos que los que se realizaron el sábado del Gran Premio de España del año pasado en el mismo trazado– pero también en carrera.
El desgaste de los neumáticos es, una vez más, un tema de discusión y sólo se puede esperar para ver cómo va a afectar y cuántas paradas en boxes van a ser necesarias. El factor de los neumáticos, por lo tanto, va a dar mucho de que pensar a los pilotos y miembros de los equipos, a la vez que va a proporcionar imprevisibilidad y espectáculo, cosa que siempre es del agrado de los aficionados.