Ferrari da por cerrado el asunto del adelantamiento de Sebastian Vettel en el Gran Premio de Brasil 2012, tras la respuesta de la FIA, que reconocía como legal el adelantamiento realizado por el piloto de Red Bull, el equipo italiano dice tomar nota de la respuesta y afirma que era necesaria la carta para solicitar una aclaración por unos hechos que han generado una gran polémica entre los aficionados.
El equipo italiano había contemplado realizar una protesta por el resultado del último Gran Premio de la temporada, después de que unas imágenes de vídeo mostrasen a Sebastian Vettel adelantando bajo banderas amarillas a un Toro Rosso, lo que tendría que haberle acarreado una sanción, que podría llevar el título de 2012 a manos de Fernando Alonso.
Ferrari envió a la FIA una carta donde solicitaban una «aclaración» sobre lo ocurrido, y la Federación con sede en París trasladó en respuesta que «la maniobra de adelantamiento no ha incumplido la normativa, por lo que no hubo infracción que investigar».
«La solicitud de clarificación realizada a la FIA en relación al adelantamiento de Vettel sobre Vergne, se produjo ante exigencia de aclarar las circunstancias surgidas en Internet en los días sucesivos a la carrera», explicó en el comunicado Ferrari.
«La carta a la FIA no tuvo en ningún caso voluntad de minar la legitimidad del resultado de la carrera. Hemos recibido decenas de miles de preguntas referentes a este caso de todas las partes del mundo y ha sido necesario por nuestra parte profundizar, pidiendo el parecer de la Federación, ante un episodio que habría podido dejar una sombra ante los ojos de todos los apasionados de la F1, no solamente a los seguidores de Ferrari», dijo en el comunicado el equipo italiano.
«Ferrari toma nota y considera cerrado el asunto», se afirmó con rotundidad desde el equipo que ya ha puesto su mirada en la próxima temporada, donde tratarán de poner en pista un coche más competitivo que el de este año.
Ante esta aclaración por parte de la FIA, el equipo Red Bull añadió que están «muy contentos, pero no sorprendidos, de que la FIA haya confirmado que no hay argumentos para contestar en relación con la carrera del Gran Premio de Brasil».