Corría el año 2007, Lewis Hamilton hacía su debut en la Fórmula 1, un sueño que llevaba dentro de la cabeza del británico desde que tenía uso de razón. Y lo hacía con un bicampeón como Fernando Alonso como compañero de garaje, toda una suerte para el joven debutante.
Hamilton era un hombre de la casa, llevaba allí desde que tenía 13 años y despuntaba en las categorías inferiores. Toda una promesa en la que Ron Dennis había puesto toda su atención. Pero la temporada 2007 no salió como se esperaba, los problemas internos entre los pilotos empañaron la que podría haber sido una temporada de oro para Fernando y para McLaren. Al final ninguno de los dos pilotos se llevó el campeonato, y a río revuelto, pescó Kimi Raikkonen.
La temporada siguiente el todavía novato Hamilton se convertiría en campeón del mundo de F1, había arrancado una nueva era de pilotos en la máxima categoría. Cuando está a punto de arrancar su decimoquinta temporada, si termina de cerrar el acuerdo con Mercedes, Hamilton hace balance de su cambio a Mercedes para la temporada 2013 y los motivos que le llevaron a decidirse por la escudería alemana.
«Estuve con McLaren desde que tenía 13 años, así que era como mi familia y me sentía seguro dentro de ese garaje», dijo Hamilton sobre los antecedentes a su etapa más laureada en la F1. «Pero me di cuenta de que el equipo de Woking ya era parte de la historia de la F1, con un palmarés envidiable y con muchos pilotos campeones del mundo que habían pilotado para McLaren».
«Cambiando de equipo podría formar parte de un viaje de crecimiento en el que yo habría jugado un papel importante. Así que decidí aceptar ese desafío, elegir un equipo fracasado en ese momento y ayudarlo a convertirse en un equipo top», dijo el heptacampeón en una entrevista con el patrocinador de Mercedes, Crowdstrike.
«Me hubiese podido quedar. Podría no haber arriesgado, pero si lo hubiera hecho probablemente sólo tendría un título tras catorce años en la Fórmula 1. Tengo que agradecer a Niki Lauda y Ross Brawn que creyesen en mí», añadió el piloto de Mercedes.
Y es que desde entonces el equipo alemán ha marcado una época de dominación absoluta en la era híbrida, ha firmado su séptimo campeonato de constructores consecutivo en 2020 y, con toda probabilidad, sumará un octavo título en 2021.
De esos siete títulos, uno lo ha logrado Nico Rosberg y los otros seis han sido para Lewis Hamilton. Lo que le ha permitido igualar los títulos de Michael Schumacher, algo que parecía impensable hace tan sólo unos años. Y si nada se tuerce con el contrato, el octavo título de pilotos pasará a engrosar el palmarés de Lewis Hamilton en la F1, convirtiéndose en el piloto más laureado de todos los tiempos.