El asesor del propietario de Red Bull, Helmut Marko, se mostró muy confiado en el potencial de la nueva creación de Adrian Newey al afirmar que si hoy se disputase una carrera ganarían sin problemas y eso que la pretemporada no ha hecho más que empezar. Sus rivales lo tienen claro, el color es bonito.
«Si la carrera se disputase ahora, les ganaríamos a todos», dijo Marko al periódico austriaco Bild. «El paso por curva del coche es increible». Pero no solo la mano derecha de multimillonario austríaco, sino que el propio Dietrich Mateschitz, normalmente muy reservado, se mostraba confiado al afirmar que «este será el tercer año fuerte de Red Bull».
Ante tanta euforia, el que puso algo de cordura fue un joven de sólo 23 años y actual campeón del mundo Sebastian Vettel cuando se le preguntó por el rendimiento del RB7 en pista y las posibilidades de cara al inicio de la temporada.
«No me puedo quejar, estoy satisfecho, pero todos los coches van a cambiar considerablemente de aquí al inicio de la temporada, si estamos por delante o no es difícil de decir», explicaba Vettel tras haber probado el Red Bull de 2011 el primer y segundo día en Cheste.
Quienes coincidían a la hora de hacer una valoración del RB7 eran dos viejos conocidos, Fernando Alonso y Michael Schumacher. En ambos casos se les preguntó acerca de como veían el coche sucesor del que logró el campeonato el año pasado.
«No se si son rápidos o no, sólo he visto que tienen los mismos colores que la temporada pasada», respondía esquivo Alonso, mientras que Michael bromeaba sobre el asunto: «¿El nuevo Red Bull? Se ve bien. El color, quiero decir».