La única forma en que la Fórmula 1 puede garantizar «carreras más interesantes» es que intervengan las autoridades del deporte.
Esa es la opinión del jefe del equipo McLaren, Andreas Seidl, cuyo piloto Carlos Sainz terminó segundo detrás de Pierre Gasly el fin de semana pasado en Monza.
El resultado fue ampliamente aclamado, aunque solo sea porque fue una ruptura temporal en el agarre aparentemente cada vez más dominante de Mercedes en la cima de la Fórmula 1.
«Dado el dominio de Mercedes, por el que trabajaron duro durante varios años para lograrlo, obviamente merecen estar donde están. Pero desafortunadamente esto lleva a carreras aburridas», dijo Seidl a motorsport-total.com.
«Así que obviamente es algo bueno cuando algo como Monza sucede en este momento. Y estoy absolutamente convencido de que con lo que viene de 2022, con el techo presupuestario y las regulaciones técnicas que deberían acercar a todos en la pista, esperamos tener nueva normalidad en F1 «, agregó.
Pero incluso si eso resulta ser cierto, sigue siendo una mala noticia no solo para el resto de la temporada 2020, sino también para la totalidad del próximo año, cuando se espera que el orden jerárquico permanezca estático.
«Creo que la única forma de tener carreras más interesantes en el próximo año y medio será ralentizar artificialmente a Mercedes o crear otras condiciones como con las redes de reversa. Esa es la realidad en la que estamos», dijo Seidl.
«No creo que se pueda resolver el problema desarrollando diferentes neumáticos para crear más paradas en boxes. Porque entonces Mercedes simplemente aceleraría a fondo durante las primeras diez vueltas e incluso antes de la primera volverían a estar al frente», agregó el alemán. .
Seidl dijo que no es fanático de las medidas artificiales para darle vida al espectáculo, pero cree que es la única forma por ahora.
«Creo que esa es la discusión que Mercedes debería tener con la FIA o la Fórmula 1, si están abiertos a algo así», dijo.
De la cabeza de un idiota salen tremendas ideas. Matemos a los sabios, a los mejores…así los mediocres, los incapaces y los vagos pasaremos a ser todos iguales. Es la «guillotina horizontal» de Tato Bores: al que se eleva por sobre el resto, le cortamos la cabeza…Fácil, fácil…