Desde entro de la F1 se espera que la FIA emita una aclaración a la normativa que ponga freno a la polémica de los mapas motor que está utilizando el equipo Red Bull, unos mapas motor que han sido comparados con un sistema de control de tracción y que estarían dando una buena ventaja al RB8.
Los directores técnicos del las escuderías de F1 que disputan el mundial 2012 se reunieron ayer lunes para discutir la situación, una reunión provocada ante las conclusiones de los comisarios de Hockenheim que investigaron el asunto justo antes del comienzo de la carrera.
La nota emitida por los comisarios exponía que «a pesar de no aceptar todos los argumentos» usados por el equipo Red Bull para explicar el uso de esos mapas motor, se veían incapaces de prohibir el sistema porque no violaba ninguna regla tal y como estaban escritas.
Así tras esta reunión se estimas que haya una aclaración de las normas, probablemente el miércoles o el jueves, en todo caso antes de que de comienzo el fin de semana del Gran Premio de Hungría 2012, última carrera antes del parón veraniego.
«Está claro que en la FIA están frustrados por ello», dijo el jefe de McLaren Martin Whitmarsh. «Así que creo que será mejor que haya una aclaración y que se deje de hacerlo en el futuro».
Joan Villadelprat, un veterano ingeniero de la F1, en su columna para el diario El País explicó: «En la F1 las normas son muy estrictas en algunos aspectos, y en otros hay cierta flexibilidad».
Incluso el jefe de filas de Red Bull, Christian Horner, veía como probable un ajuste de la normativa, lo que hace pensar que en el equipo de las bebidas energéticas tienen claro que no incumplen las reglas, pero que la FIA quiere frenar ese camino a toda costa.
«El reglamento (actual) es claro, aunque podría ser que diseñasen nuevas directivas técnicas para tratar de aclarar las normas», dijo Horner.