Al igual que Lotus, el equipo Virgin no va a desarrollar el famoso sistema denominado ‘conducto-F’. Confirmando la noticia, el piloto de Lotus, Heikki Kovalainen, manifestó el pasado fin de semana en Barcelona que el equipo pronto se centrará en el coche del próximo año.
En un mismo contexto se expresó el piloto alemán de Virgin Racing, Timo Glock, quien en declaraciones a Auto Motor und Sport dijo que sería «absurdo» si Virgin «inverte su tiempo» en desarrollar un ‘conducto F’ y no en las zonas más fundamentales del monoplaza. El 99 por ciento de nuestro esfuerzo se centra en la fiabilidad.»
John Booth, jefe del equipo, confirmó las palabras de Glock, añadiendo que las prioridades de Virgin están en otra parte. «El 99 por ciento de nuestro esfuerzo se centra en la fiabilidad, esperamos que de esta carrera hacia adelante podemos empezar a mejorar el rendimiento del coche», indicó.
El innovador sistema implantado originalmente este año por McLaren y posteriormente imitado por Ferrari, Sauber y Williams, ha sido prohibido para la próxima temporada, algo que no ha hecho mucha gracia al jefe de los de Woking, Martin Whitmarsh, quien ha afirmado sentirse decepcionado tras conocer la decisión de la FOTA.
«Es una tecnología de bajo coste. Hay un montón de razones por las que es bueno para el deporte», explicó el presidente de la FOTA, cuyos monoplazas, los MP4-25 de Button y Hamilton, son los únicos equipados con el conducto-F para la carrera de Mónaco.
Whitmarsh explicó el jueves que «es algo que funciona mejor en las rectas largas que en un circuito como este», pero aun así en Mclaren han decidido utilizarlo este fin de semana.
Ferrari, por su parte, volverá a instalar el dispositivo en el F10 para la prueba de Estambul, donde se espera que Red Bull pueda probarlo en sus bólidos por primera vez.
(GMM)