Por si a alguien le parecía que esta temporada no era una auténtico caos, un pequeño estudio desvela que los coches que menos evolucionaron en la última carrera también resultaron ser los más rápidos en la pista de Montmeló, el resultado es que los monoplazas más simples y con menos mejoras son los más efectivos.
Eso es lo que se desprende de una noticia publicada por la revista alemana Auto Motor und Sport: «¿Quién llevó el menor número de cambios técnicos al Gran Premio español? Lotus y Williams. Y, ¿quién tenía los coches más rápidos? Lotus y Williams».
Resulta realmente extraño para un mundo como la F1, donde normalmente una pequeña innovación técnica puede dar al coche una o dos décimas, por lo que los equipos se pasan todo el año desarrollando sus monoplazas, ahora va a ser necesario frenar ese ritmo frenético de evolución para tratar de resolver los misterios de los nuevos neumáticos de Pirelli.
«Estamos recibiendo menos piezas nuevas que el año pasado, en su lugar invertimos más tiempo en la comprensión de nuestro coche», confirmó el jefe del equipo Red Bull, Christian Horner.
El diario alemán Bild am Sonntag añadió: «Los jefes de (Sebastian) Vettel han decidido que no habrá nuevas piezas hasta que no se comprenda bien el funcionamiento de los viejos componentes».
En contraste al elevado grado de complejidad del coche de las bebidas energéticas están los coches de Lotus y Williams, fáciles de pilotar y fáciles de configurar, lo que los convierte en monoplazas adecuados a todos los trazados y a todas las situaciones.
A pesar del despiste que está suponiendo para todos los equipos comprender el motivo de que su coche va bien en un instante determinado, mientras que unas pocas vueltas después su rendimiento decae, la temporada todavía acaba de comenzar, nos quedan 15 carreras por delante, tiempo más que suficiente para que los ingenieros de los equipos descubran como neutralizar el efecto de las gomas.