El límite presupuestario en los equipos es una de las grandes novedades que se introducen en esta temporada 2021. Los equipos se encontrarán con un toque de 145 millones de dólares por temporada, una medida que busca hacer rentable en sí misma la categoría al tiempo que ofrece una oportunidad a los equipos con menor músculo financiero para seguir en la Fórmula 1.
Aunque en ese presupuesto no se tendrá en cuenta el salario de los pilotos ni los tres salarios más elevados de cada escudería, así como algunas otras partidas no relacionadas con la parte técnica, es un gran paso para evitar que tras cada escudería tenga que existir una máquina de inyectar billetes por parte de los fabricantes de automóviles.
Por otra parte es una forma de alentar a otros equipos a entrar en la competición, los gastos desorbitados de más de 300 millones de euros hacen difícil la entrada de un equipo que vería complicado obtener resultados sin una inversión de menos de 200 millones por temporada.
Aunque en la práctica el límite presupuestario sólo afecta a tres equipos: Mercedes, Red Bull y Ferrari. El resto de equipos ya estaban en esa cifra de los 145 millones o muy por debajo como en el caso de Haas o Williams.
En Red Bull ya habían trabajado en ese cambio afrontando una reorganización en su segundo equipo, AlphaTauri, que ha visto una mejora competitiva importante y se ha cambiado su enfoque, dejó de ser el segundo equipo y banco de pruebas de pilotos jóvenes, para pasar a ser tratado como un equipo hermano.
Ferrari ha optado por una estrategia similar. Buena parte de sus recursos en desarrollo han sido movidos al pequeño equipo estadounidense Haas, cliente de sus unidades de potencia y con una fuerte vinculación esta temporada al debutar Mick Schumacher, hijo del heptacampeón y piloto del programa de la Academia Ferrari.
Los de Maranello también han anunciado su regreso a las carreras de resistencia, con un programa que les llevará a debutar en Hypercar en la temporada 2023. De este modo logran estar por debajo del límite presupuestario sin despedir a personal que podría terminar en equipos rivales con muchos conocimientos que no están dispuestos a que se conozcan más allá de los muros de Maranello.
Así que la pregunta para Toto Wolff, era inevitable, ¿hará Mercedes lo mismo?¿Mirará hacia el Campeonato Mundial de Resistencia?
«Por el momento eso no está planteado», dijo el director de la escudería alemana a la revista italiana Autosprint. Sin embargo admitió que el equipo de Fórmula E de Mercedes es un buen «puerto de destino» para el personal que ya no pueden tener en la Fórmula 1.
Y el otro gran pilar con el que seguirán conservando al personal en Brackley es la recientemente inaugurada división de Ciencias Aplicadas. Este nueva división estará centrada en proyectos de alto rendimiento como la Copa América o el Tour de Francia.
Wolff admitía que el límite presupuestario tendrá un gran impacto en la escudería Mercedes, pero quiso mirar al futuro con optimismo al afirmar que eso les dio «la oportunidad de replantear su empresa».
«Es por eso que fundamos nuestra división de Ciencias Aplicadas, para llevar el conocimiento de la Fórmula 1 a muchos clientes diferentes de esta manera. Desempeñará un papel importante en nuestra empresa», agregó Wolff en declaraciones recogidas por SpeedWeek.
Habrá que esperar un par de temporadas para ver el impacto real de esta medida, pero si se logra que los equipos puedan sobrevivir sin la inyección de capital permanente de los fabricantes será muy bienvenida. Por una parte asegura la supervivencia de los equipos y por otra reduce la brecha que tienen los grandes equipos con los pequeños, lo que debería redundar en una competición mucho más reñida.