El equipo Mercedes ha decidido reforzar el equipo de apoyo de Michael Schumacher para afrontar el Gran Premio de Europa 2012, que se disputa este fin de semana en el circuito urbano de Valencia, como medida adicional para poner fin a la impresionante racha de falta de fiabilidad del W03 del heptacampeón.
Mientras que su compañero Nico Rosberg ha terminado todas las carreras disputadas hasta la fecha en 2012 y sigue en la lucha por el título, el heptacampeón cuenta en su haber con cinco abandonos y sólo dos puntos en los siete Grandes Premios.
El diario alemán Bild informa de que en un intento por detener de una vez la sangría, el jefe del equipo Ross Brawn ha decidido reforzar el equipo de Schumacher con el apoyo adicional de un nuevo ingeniero jefe.
Su trabajo consistirá en supervisar el trabajo de los mecánicos, después de que en la fábrica de Brackely «revisasen dos y tres veces» todos los componentes del W03 que pilotará Schumacher en la carrera de Valencia.
«Lo que está sucediendo en este momento con Michael no es el estándar por el que nos esforzamos», admitió Rosberg.
Brawn añadió: «Nuestros estándares son extremadamente altos aquí, no hemos cambiado nuestra estrategia o cualquiera de nuestros procedimientos, no hemos tomado ningún atajo o dejado que algo fuese de cualquier manera, así que ha sido muy frustrante y peculiar».
«Así que estamos constantemente buscando el modo en que podemos mejorar nuestra forma de trabajar y podemos hacerlo mejor», añadió el jefe de Mercedes.
Pero el patrón de la F1 ha añadido más leña al fuego, en medio de la disputa que mantienen por el Acuerdo de la Concordia con el fabricante de automóviles alemán, al hablar de los problemas que está teniendo Schumacher en estas carreras.
«Creo que si él (Schumacher) todavía estuviese en Ferrari, todavía estaría ganado hoy», dijo Bernie Ecclestone a la revista alemana Sport Bild.