Dejamos atrás Europa para regresar al continente asiático que dejamos allá por marzo, después de nueve carreras más el panorama es bien diferente, mientras en marzo reinaba la incertidumbre, ahora que nos acercamos a la única carrera nocturna del calendario las cosas parecen cada vez más claras de cara al título.
Al menos, lo que está claro es que no todos tienen opciones, aunque pueda ser matemáticamente, la probabilidad juega en su contra. Jenson Button está sexto a 78 puntos de Fernando Alonso, que hasta el momento lidera con mano de hierro, las opciones del campeón de 2009 son casi inexistentes.
Con esto nos quedamos con cinco pilotos, a saber: Fernando Alonso, Lewis Hamilton, Kimi Raikkonen, Sebastian Vettel y Mark Webber. Claramente Alonso y Hamilton lucharán por el mundial, mientras que Raikkonen podría alzarse como juez y parte en la lucha final. Los de Red Bull van cuesta abajo, sus problemas de fiabilidad les están llevando por el camino de la amargura.
Pero miremos a Singapur, el trazado de Marina Bay, todo lo opuesto a la última carrera en Monza, en Italia primaba la velocidad, aquí acercarse al máximo al muro sin cometer ningún error.
La velocidad promedio en Singapur es una de las más bajas del calendario de F1, así que los equipos se afanan por utilizar los valores más altos de carga aerodinámica que les garantice el máximo agarre en las 23 curvas que tiene el circuito iluminado por la luz artificial en un intento por favorecer los horarios diurnos de los telespectadores en Europa.
Con esto la F1 se crea una coraza para proteger a su paddock, todos los integrantes de los equipos desplazados a Singapur mantienen horario de Europa, con el fin de estar en las mejores condiciones de afrontar una carrera que se disputa a las 20:00 hora local.