Sebastian Vettel se ha desmarcado de cualquier insinuación de que haya establecido como objetivo lograr una carrera deportiva como la de su amigo y mentor Michael Schumacher, que acumula 7 títulos del Campeonato de Pilotos con un total de 91 victorias en Grandes Premios.
El pasado fin de semana en Susseldorf, la pareja de pilotos alemanes ganó la Copa de las Naciones por quinta vez consecutiva dentro de la Carrera de los Campeones.
Pero en el mundo de la F1, aunque el joven Vettel de 24 años es el actual campeón del mundo todavía está cinco campeonatos y 70 victorias por debajo de los logros del «viejo» Schumacher.
«Claro que puede hacerlo», dijo Schumacher, que cumplirá 43 años el próximo mes, a la revista alemana Sport Bild. «Siempre he dicho que los registros están ahí para ser superados, así que ¿por qué debería pesar de manera diferente ahora?»
El piloto de Red Bull, sin embargo, dijo a la televisión austriaca Servus TV el lunes pasado que «lo de Michael está demasiado lejos de lo que he conseguido. Así que no se puede establecer como una meta».
También se le preguntó a Vettel sobre su dominio en 2011 y explicaba que no podía recordar como celebró su victoria en España hace tan sólo seis meses, cuando su jefe Christian Horner dijo riendo aquello de «lo que tenemos aquí es un problema de lujo», en referencia a los problemas entre sus pilotos.
Otro de los problemas es su tendencia, hasta en cuatro ocasiones en 2011, a accidentarse en los entrenamientos libres de los viernes, pero el responsable del programa de jóvenes pilotos de Red Bull, Helmut Marko, barrió para casa: «Hay que decir que luego siempre ganó la carrera».
Y no solo para Vettel…. Para todos los pilotos actuales están bien lejos.