Ross Brawn, quién también había dejado Ferrari en 2006, apostaría que Michael Schumacher logrará al menos una victoria en su regreso a la Fórmula 1. Pero su apuesta por la victoria en el mundial se centra en su piloto Jenson Button y en su escudería, a pesar del peligroso acercamiento que ha realizado Red Bull tras las últimas carreras.
A pesar de todos los cambios que ha sufrido la Fórmula 1 en los años de retiro del Kaiser, Ross considera que la adaptación no será demasiado dificil para el piloto alemán, aunque debe adquirir confianza en el nuevo monoplaza. Tras la negativa de Williams y Red Bull, Schumacher se ha entrenado con el monoplaza de 2007 en Mugello y en karts en el circuito de Lonato.
Para el «mago» inglés si Michael no logra alguna victoria en el período de sustitución de Felipe Massa no será por él, sino por la falta de competitividad de Ferrari.
La falta de competitividad de la Scuderia parece haber desaparecido tras el Gran Premio de Hungría 2009, donde a pesar de haber corrido con un sólo monoplaza, Kimi Raikkonen logró alzarse con el segundo cajón del podio.
Las carreras de Ross Brawn y Michael Schumacher se mantuvieron unidas hasta la retirada de Michael en 2006. Ambos se encontraron en la escudería Benetton, donde Michael ganó sus dos primeros campeonatos, y luego se fueron, junto a otras figuras clave en esos dos campeonatos, a Ferrari donde regresaron los día de gloria a la escudería de Manarello tras más de 20 años sin victorias.