El vigente campeón del mundo, Sebastian Vettel, que el año pasado firmaba su primera victoria en el exclusivo trazado urbano de la Costa Azul saliendo desde la pole, para este año ha admitido que simplemente aspira a estar entre los diez primeros cuando se llegue al final de las 78 vueltas del Gran Premio de Mónaco 2012.
En lo que quizás sea el cambio más importante de esta temporada con relación a 2011, la última creación de Adrian Newey parece muy inferior a los coches de Lotus, Ferrari, McLaren, Williams, Sauber, Mercedes e incluso podríamos afirmar que algún otro se muestra superior en las calles del principado.
«El top ten es posible, creo», dijo el bicampeón alemán a Sport1, aunque su compañero de equipo, el australiano Mark Webber advertía que incluso simplemente eso «podría ser bastante difícil».
Si se tiene en cuenta que los dos últimos años fueron coser y cantar para los hombres de Red Bull, Webber logró pole y victoria en 2012, mientras que Vettel hizo lo mismo en 2011, este año está siendo realmente duro.
Así las cosas, quizás en el motorhome de las bebidas energéticas estén rezando alguna plegaria para que la lluvia haga su aparición en la sesión de clasificación de hoy sábado y en la carrera de mañana domingo, lo que, si las suerte les acompaña, podría darles alguna opción de luchar por la victoria.
Pero la lluvia en Mónaco en sinónimo de carrera loca, complicada y extremadamente dura para los pilotos, con lo que nada garantiza que si llueve no puedas terminar yendo por las escapatorias o, peor, terminar empotrado contra el muro.
El sistema de información meteorológica francés no anuncia una elevada probabilidad de lluvia para clasificación y carrera, aunque si se advierte que en el momento de la clasificación podrían caer algunas gotas, si ocurriese hacer una vuelta lo antes posible con las gomas de seco podría sentenciar quienes pasan el corte, e incluso quien se lleva la pole.