Bernie Ecclestone ha desmentido las acusaciones de que el gran premio español del próximo mes podría ser cancelado. El lunes se confirmó que la sesión japonesa de este fin de semana de la MotoGP había sido cancelada por problemas en los vuelos debido a las cenizas del volcán que se extienden sobre Europa.
Los partidos de fútbol entre el Atlético de Madrid y el Liverpool, así como el de Hamburg-Fulham, también podrían ser aplazados, la UEFA tomará una decisión “en los próximos días”. Afortunadamente para la F1, ahora tenemos un descanso poco común de tres semanas entre el domingo de Shanghai y la apertura de la temporada en España.
Pero con cientos de toneladas de carga, incluyendo los coches, varadas en el aeropuerto de Shanghai –mientras que seis jets 747 no pueden despegar en Europa- es actualmente imposible predecir cuándo regresarán a sus fábricas las equipaciones.
“La preocupación principal es traer los motores de vuelta porque hay que trabajar en ellos”, declaró el jefe ejecutivo de la fórmula uno, Ecclestone, al Times. “Pero estoy seguro de que todo saldrá bien”, añadió el directivo, cuyo avión privado en Shanghai actualmente no puede regresar a Europa.
“Sabemos que habrá un Gran Premio español, solo que no sabemos dónde aún”, bromeó con otro reportero en China, añadiendo que su plan-B es “el suicidio”. “Sin duda, el gran premio español no será cancelado”, insistió. “Claro que está causando problemas a todo el mundo, pero encontraremos el modo de llevar a todo el mundo a casa.”
El movimiento de la gente de la F1 es menos problemático, aunque caro: varios equipos –incluidos McLaren y Ferrari- están organizando vuelos privados a España para el martes o el miércoles, donde la mayoría de los aeropuertos todavía están abiertos. El personal volverá después a sus respectivas sedes en autobús. Otra gente de la F1 se ha desviado a Dubai o incluso a los Estados Unidos, con la esperanza de encontrar otra ruta aérea de regreso a Europa.
En lo que respecta a las cargas, el final del caos aéreo podría estar cerca, después de que British Airways, Air France y KLM probasen sus aviones en los cielos europeos sin problemas. La aerolínea de Niki Lauda llevó a cabo una prueba con un Airbus A320 de Viena a Salzburgo. “El vuelo estuvo mejor que nunca, con cielos azules. No entiendo a qué viene tanto alboroto”, comentó el triple campeón del mundo.
(GMM)
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